Saltar la navegación

Energías no renovables

Centrales eléctricas de fuente de energía no renovable

Las centrales eléctricas de fuentes de energía no renovable producen la mayor parte de la electricidad que consumimos. Son de dos tipos: térmicas y nucleares.
En ellas se convierte en electricidad la energía mecánica del vapor de agua a presión.

Centrales térmicas

Centrales térmicas de combustibles fósiles

Se calienta agua en una caldera mediante el calor generado por la combustión de los combustibles (carbón, gas o petróleo). El vapor de agua generado mueve una turbina conectada al rotor de un generador que suministra corriente eléctrica a
la red de alta tensión. El vapor pasa después por un condensador que vuelve a convertirlo en líquido, y este es bombeado de nuevo hacia la caldera para comenzar otra vez el proceso.

Planta térmica
haunolda. Pixabay. Planta térmica

Centrales de ciclo combinado
En estas centrales, se obtienen electricidad a través de dos ciclos combinados: el de las centrales térmicas convencionales y otro en el que se utiliza aire y gas.
Para este último ciclo se emplea una turbina de gas que incluye un compresor.
Este comprime el aire entrante, que se mezcla con el gas antes de proceder a su combustión, mediante la cual se genera electricidad en la turbina. Los gases se llevan a una caldera de recuperación donde transfieren su energía al agua del segundo ciclo.

El rendimiento de este tipo de central es superior al de las centrales de ciclo único.

Centrales nucleares

Centrales nucleares

Son centrales térmicas en las que la caldera ha sido sustituida por un reactor nuclear, el vapor de agua a presión se produce por el calor que se genera cuando los núcleos atómicos (uranio: U-235 y U-238) sufren un proceso de fisión
(rotura) nuclear al ser bombardeados por neutrones, como consecuencia de esta fisión se libera una gran cantidad de energía, que es la que se utiliza para producir vapor de agua en el reactor nuclear.

El vapor de agua generado mueve una turbina conectada al rotor de un generador que suministra corriente eléctrica a la red
de alta tensión. El vapor pasa después por un condensador que vuelve a convertirlo en líquido, y este es bombeado de nuevo hacia el reactor para comenzar otra vez el proceso.

Central nuclear
Pixabay. Central nuclear